¡Hola a todos! Después de tantísimo tiempo, esta cuarentena me está permitiendo escribir un poco, aunque más bien sólo me permite esribir para un montón de trabajos de clase… El primer libro que he conseguido acabar (sacando tiempo y desperezándome un poco) es el de Los Incursores escrito por Mary Norton. Así pues, ¡damos comienzo a esta reseña!
Ficha técnica
- Título: Los incursores.
- Autora: Mary Norton.
- Traducción: Héctor Silva.
- Género: novela fantástica.
- Editorial: Blackie Books.
- Edición 1ª: España, 2019.
- Páginas: 344.
- Precio: 19,90€.
- ISBN: 978-84-17552-70-1.
Sinopsis (extraída de Blackie Books)
«Arrietty es más diminuta que un terrón de azúcar. Pero es muy valiente, porque con una aguja como espada deberá salvar a toda su familia, con la que vive bajo el suelo de un viejo caserón.
Ellos son LOS INCURSORES. No poseen nada y por eso deben vivir peligrosas aventuras cada vez que quieren «tomar prestada» alguna de las pertenencias de los dueños de la casa: los enormes «serumanos».
Hasta que Arrietty conoce a uno de ellos, un niño muy especial. Y sus vidas cambian para siempre.»
Opinión personal
En primer lugar, desconocía esta editorial y la verdad, me ha gustado mucho el trato de la edición. Compré una edición de tapa dura con una ilustración preciosa, cuyos detalles dorados destacaban sobre el resto de colores, junto con las flores color rosa. Además, en la primera página del libro, proporcionan un poco de información acerca de la autora. No tengo ni idea si esto lo hacen con todos sus libros, pero me gustó.
Empecé a leer este libro a finales del año pasado cuando lo compré y al principio se me hizo bastante ameno de leer, pero según iba pasando páginas se me iba haciendo cada vez más pesado. A continuación os explicaré el motivo.
La primera parte del libro, Los Incursores, trata de aventurillas que vive la familia Clock (compuesta por Pod, Homily y la hija de ellos, Arrietty). Enseñan lo que viene siendo la acción de incursionar, es decir ir a la casa donde viven los humanos para «coger prestadas» cosas que estos necesitan. Eso sí, la única norma de incursionar es que NO pueden ser vistos. Pero acaban teniendo cierto contacto con un niño humano, así que al ser descubiertos tienen que huir, abandonar el que era su hogar. Hasta aquí, la historia bastante bien, he de decir que era entretenido y divertido ver cómo se escurrían por la casa para conseguir todo lo necesario para que ellos pudieran vivir su vida.
Ahora bien, una vez empieza la segunda parte del libro, Los Incursores en el campo, se empieza a torcer mi lectura. Empieza a hacerse cada vez más pesado seguir leyendo, demasiados detalles -que están genial para imaginar bien la historia, pero personalmente era excesivo-. Cada vez se hacía todo más lento para avanzar para que el final de la historia te lo «cierren» (entre comillas porque lo dejan un poco entreabierto) en uno o dos capítulos. Entonces, como decía, aunque el texto es un poco barroco (por la cantidad de detellas que hay como he dicho), el final me gustó por el simple hecho de dejarlo un poco abierto. En esta segunda parte, sobre todo se puede ver una pequeña evolución del personaje de Homily, ya que vemos cómo se adapta a su «nueva vida» (aunque dura poco ya que vuelve a su «vida normal» más bien pronto). También se ve como Pod tiene en algo más de consideración a Arrietty como incursora. Y, en ambas partes del libro, podemos ver que Arrietty sigue siendo igual de curiosa por todo, ¡aunque sí que se lleva algunos sustillos en la segunda parte!
Valoración
Realmente mi puntuación es de 3,5*, pero no se pueden poner medios, así que lo redondeo a la alza. Más que nada porque es un libro que sobre todo recomendaría a niños de quizás a partir de 8-10 años en adelante, ya que pueden vivir muchas aventuras con estos diminutos personajes.
Así pues, ¿habéis leído este libro? ¿Os ha gustado? ¿Tenéis pensado leerlo? Si no lo habéis leído os lo recomiendo y, en caso de que lo hayáis leído, me gustaría saber vuestra opinión ♥
Frases favoritas
«-Arrietty -dijo alegremente-, ¿te gustaría ir con tu padre y traerme un poco de fibra del felpudo que hay en el vestíbulo?
Arrietty dio un salto de alegría.
-¡Oh! -exclamó-. ¿Puedo?
-Bueno, quítate el delantal – dijo Homily- y cámbiate el calzado. Para incursionar necesitas calzado ligero. Ponte las zapatillas rojas.»
«¡Qué mundo!… Kilómetros y kilómetros, cosas y más cosas, un cúmulo de riquezas inimaginables…, ¡y ella podía haberse quedado sin conocerlo! Podía haber vivido y muero, como lo habían hecho tantos de sus parientes, en una penumbra polvorienta, oculta detrás de un friso.»
«-¡Oh, mira! – exclamó Homily, al ver una pimpinela escarlata; se detuvo y la arrancó acogiéndola por el velludo tallo-. ¿No es preciosa? -dijo con voz enternecida; acarició los frágiles pétalos con un dedo curtido y se la colocó en el escote de la blusa. Arrietty halló, a su vez, una delicada amampola azul pálido, que se colocó en el pelo; y de pronto, el día empezó a parecer una fiesta. «Flores hechas para incursores», pensó.»
Dónde adquirirlo
Domadora de letras 